Algunos libros son como abrelatas: leerlos conduce a una nueva lectura. En 1982, con el apoyo de un viejo amigo, descubrí que comedia humana Autor: William Saroyan (1908-1981), escritor armenio-californiano. He recomendado esta novela a mucha gente y todos me han agradecido la sugerencia.
Esta nueva edición es de Javier Calvo (Parabura, Madrid, 2025, 222 páginas), lo cual es una buena noticia. Una historia inolvidable y profundamente conmovedora para todas las edades, llena de momentos trágicos pero también llena de pasión por vivir, hacer el bien y compartir penas y alegrías, basada en la obra de Homer McCauley, quien se encargó de enviar telegramas a sus conciudadanos en Ithaca (California) durante la Segunda Guerra Mundial. En algunos lugares, se informó de la muerte de un niño en el frente.
Como ocurre con todas las obras de Saroyan, hay un elemento biográfico, ya que tuvo una infancia muy difícil ya que su padre murió joven y tuvo que trabajar desde muy joven. Es autodidacta, lo que se nota cuando aborda algunas cuestiones filosóficas o teológicas. También es un excelente dramaturgo y cuentista… En esta novela se ha realizado bien su deseo de “mostrar la fraternidad humana”.
Por la misma época se publicó en 1957 otra de sus obras menos conocidas: Estas loco papa (EUNSA. Pamplona, 2025, 211 páginas, traducido y anotado por Joseluís González). Pete, de diez años, es el narrador. Sus padres se habían separado, pero los motivos no estaban claros. Su hermana vivía con su madre, y viajó una corta distancia hasta la costa de California con su padre, dedicando breves capítulos a lo que hacían en un momento de crisis económica y profesional (el padre era escritor). La relación es estupenda, Pete es inteligente, hace todo tipo de preguntas, tiene sueños, admira a su padre, pero también es consciente de sus propias limitaciones, y ambos afrontan las dificultades con optimismo, ganas de vivir y falta de resentimiento. La forma de contar la narración desde el punto de vista del niño y en el lenguaje es acertada (comer, ir al colegio, excursiones, paseos…).
Hay algunas escenas divertidas y otras conmovedoras. Rara vez se menciona a la madre y a la hermana, lo cual es un poco sorprendente, excepto en Navidad, cuando todos se ven. Dos historias que vienen perfectas para estas fechas navideñas.