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Un estadounidense confesó haber colocado bombas caseras en oficinas de los partidos demócrata y republicano en 2021. Los intentos de ataque se produjeron en vísperas del asalto al Capitolio por parte de partidarios de Trump, pero Brian Cole, de 30 años, niega que hubiera alguna conexión entre ellos.
Cole colocó bombas llenas de pólvora y piezas de metal cerca de las sedes de ambos partidos en la capital, Washington. Aunque no explotaron, podrían haber causado daños importantes e incluso víctimas mortales, según la policía.
Durante años no quedó claro quién colocó las bombas y si lo hizo, por ejemplo, para desviar la atención de la policía en el período previo al asalto al Capitolio. Los partidarios de Trump irrumpieron ese día en la sede del Congreso de Estados Unidos e intentaron en vano impedir la confirmación de la victoria electoral del demócrata Biden.
“Resultados electorales manipulados”
Cole fue arrestado a principios de este mes después de que el FBI revisara las pruebas recopiladas este año. Al parecer, había comprado suministros para las bombas caseras y su coche fue visto cerca de ambas oficinas en ese momento. Según el FBI, Cole inicialmente lo negó, pero finalmente confesó ser el autor.
En un interrogatorio que duró varias horas, Cole dijo que “algo dentro de él se rompió” porque estaba convencido de que los resultados electorales habían sido “amañados”. “Alguien tiene que hacer algo al respecto, ¿verdad?” se había preguntado.
El presidente Trump había dicho repetidamente en el período previo a las elecciones que sólo podría perder si los demócratas hacían trampa. Cuando Biden recibió la mayor cantidad de votos, Trump insistió sin pruebas en que se había cometido fraude. Con declaraciones tan infundadas logró persuadir a sus seguidores a marchar hacia el Capitolio, lo que provocó el asalto al edificio.
Prórroga de la prisión preventiva
Cole decidió apuntar tanto a los demócratas como a los republicanos porque “ya terminé con ambos partidos”. Según él, ambos partidos han contribuido a la mala situación de la política estadounidense. Después de todo, juntos eran “responsables” del país.
Según admitió él mismo, Cole estaba feliz de que sus bombas no explotaran al final. Dijo que decidió conscientemente lanzar un ataque nocturno para evitar víctimas. Había utilizado temporizadores de cocina como encendedores, que deberían haber sonado una hora después de la instalación. Cole niega que su momento estuviera relacionado con el asalto al Capitolio.
El FBI compartió la confesión de Cole cuando solicitó una extensión de su detención. El juez decidirá mañana si lo aprueba.
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